El biomagnetismo o terapia magnética es un tipo de terapia creada por el Doctor Mexicano Isaac Goiz Durán. Es un tipo de terapia complementaria indicada para tratar diversas patologías, desde aliviar síntomas de un simple resfriado o dolores de cabeza hasta liberar al paciente de tumores y de otras afecciones más graves.
La terapia biomagnética puede eliminar las causas que originan determinada enfermedad a partir de la imposición de imanes en diferentes zonas del cuerpo, ello porque un desequilibrio en el pH del cuerpo humano es el causante de la mayoría de las enfermedades; por lo tanto, al corregir el desequilibrio, la salud se ve afectada de forma positiva. Así se posiciona un imán en el punto del desequilibrio y otro imán en un punto de polaridad contraria para lograr este equilibrio a través del llamado “par biomagnético”.
En pocas palabras, el biomagnetismo corrige la alteración iónica y recupera el equilibrio de nuestro cuerpo.
Para aplicar este tipo de terapia los imanes se aplican en diversas zonas del cuerpo, como si se tratase de un escaneo. Una vez que se reconocen los órganos y tejidos que se encuentran afectados, el especialista aplica un conjunto de imanes en dichos puntos en un periodo de tiempo que varia por cada persona. Una terapia puede durar hasta 90 minutos y se estima que se necesitan un promedio de cinco terapias para ver resultados positivos.
En líneas generales, el biomagnetismo trabaja sobre alrededor de 300 puntos distribuidos en el cuerpo.
Entrevista Doctor Isaac Goiz.
Uno de los principales beneficios del biomagnetismo es que permite curar importantes enfermedades sin efectos secundarios; de igual forma, no requiere medicamentos, aunque no se contrapone al uso de los mismos. De acuerdo a expertos, el biomagnetismo permite llegar a la etiología de la enfermedad, es decir, permite determinar cuáles son los microorganismos patógenos causantes de una enfermedad, mientras que la medicina tradicional se aproxima a la enfermedad por medio de los síntomas.
Asimismo, esta terapia se destaca por algunos beneficios en quienes se someten a ella. En primer lugar, es una terapia compatible con otra forma de terapia alternativa e, incluso, puede utilizarse de forma simultánea con tratamientos alopáticos tradicionales. Por otro lado, el biomagnetismo ejerce un efecto de corrección sobre las distorsiones energéticas presentes en nuestro organismo.
De igual manera, la terapia ha demostrado que el polo positivo impulsa y fortalece los procesos biológicos del cuerpo. En ese sentido, es sumamente beneficioso para el caso de debilidades, desgarros musculares, fracturas de huesos, esguinces y cicatrización de heridas. Asimismo, se ha demostrado que desde la primera o segunda sesión el paciente comienza a notar cambios positivos en la salud.